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Está demás decir q es una analogía...
pero esperaba chantarme las chuteras
de nuevo en cualquier momento.
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Es que resulta que vivimos en una ciudad de más de millón y medio de habitantes con el movimiento económico más 'en movimiento' (valga la redundancia) del calderillo en ebollición llamado Bolivia.
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También resulta que vivimos en la ciudad de mayor recepción interna de migrantes, donde se produce una aculturización al final muy enriquecedora, lo que sin duda significa que en esta capital oriental se está gestando la nueva bolivianidad.
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Entonces... ¿POR QUÉ VIVIMOS ATASCADOS EN TARAS DEL PUEBLO CHICO QUE SE RESISTE A QUITARSE EL TÍTULO DE VILLORIO GRANDE Y NOSTÁLGICO?
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La Rutina del pueblo chico puede ser una gran pelotuda que lo único que te provee son altas dosis de ansiedad, un equilibrio precario de Paz Armada y probablemente la inminente caída en el "poco" investigado y tan local miedo a dejar de ser pueblo, al que podríamos darnos licencia de llamar PUEBLOFOBIA...
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Creo que si algo tengo claro es que no me gustan las dictaduras de ningún tipo y porsupuesto NO está en mis planes vivir a gusto en plena dictadura de la PUEBLOFOBIA.
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Es hora de volver a organizarse, replantear metas, botar los tinteros a medias, animarse a cruzar, dejarse llevar por los sueños, sonreír, tirarse a la piscina, proyectar objetivos, CREAR...
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Convencerse de una vez por todas que somos los únicos artífices de nuestra realidad, nada de fobias de pueblo que te impongan sus propias reglas del juego.
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Mágicos pensamientos... lo mejor de todo es que tenemos la varita en la mano.
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En mi guerra sin cuartel contra la PUEBLOFOBIA ya se dispararon los primeros tiros, tengo las chuteras puestas y mejor me voy a calentar porque el partido está por comenzar...
Victor Heredia en "Razón de Vivir"
No pudo ser más AD-OC
Excelente noche de charlas en Café24, mi querida Escandalosa